Esta fortificación del siglo XI fue construida para proteger Lloret y su región de ataques provenientes del mar.
Está ubicado en un acantilado entre la playa principal de Lloret y la playa de Fenals. Desde lejos, si bien destaca su torre en el cielo azul, se funde entre las rocas del mismo color que sus paredes y los árboles.
El Castillo de San Juan sufrió varios ataques a lo largo de su existencia. El más destructor fue un bombardeo del siglo XIV por los británicos. En el siglo XX es cuando se restauró varias veces, aunque hoy solo se puede ver alguna parte de los vestigios del castillo original.
La torre restaurada y el recinto señalizado se pueden visitar. Allí vale la pena, aparte del valor histórico del castillo, la maravillosa vista panorámica que te ofrece su ubicación privilegiada.